Les pesqueres: historia y tradición
Pesca con redes, por arrastre, al cerco… Existen todo tipo de técnicas de pesca que se adaptan y varían en función del tipo de pez que se quiera conseguir, al tipo de aguas en el que vive y, también, al entorno desde el que se realiza la actividad. ¿Sabías que en algunos pueblos de Costa Blanca Norte se practicaba una de las técnicas de pesca más espectaculares (y peligrosas) que han existido? Recibe el nombre de “les pesqueres” y en este artículo te contamos todo sobre esta antigua práctica.
Un poco de historia
La pesca es una actividad que llevamos practicando desde los albores de la humanidad. Con el paso del tiempo, los peces han tenido que encontrar nuevos lugares en los que refugiarse, como las aguas que hay bajo los acantilados ya que son de difícil acceso para los barcos por la proximidad de las rocas. La Costa Blanca Norte dibuja diferentes acantilados a lo largo de su recorrido y, ¿cuál es la mejor forma de pescar desde ahí? El nombre de ‘Les Pesqueres’ se debe a que en la antigüedad se descolgaban muchos pescadores por las paredes de los acantilados para pescar. La historia cuenta que lo hacían sobre las rocas o sobre cañizos con los métodos tradicionales de caña y fitora (tridente). Esta actividad generó unas estructuras de escaleras, cuerdas y cañas llamadas “pesqueres”.
Como decimos, era una forma de pesca muy arriesgada que solían realizar, sobre todo, pescadores de la localidad de Benitachell. Hoy en día, este método apenas lo practican algunos familiares de esos atrevidos pescadores que han heredado la tradición. De hecho, todavía se pueden ver algunas escaleras y cuerdas que se utilizaban en la zona del Morro de Toix, cerca de Altea.
¿Por qué se hacía así?
En la pesca desde los acantilados se utiliza la técnica “en vertical”, que básicamente consiste en depositar el cebo en el agua, consiguiendo pescar en grandes profundidades sin necesidad de realizar largos lanzados. También hay que tener en cuenta el momento en el que se vaya a realizar la pesca: paradójicamente, un buen momento será después de una racha de mal tiempo, ya que los peces buscan refugio de las fuertes corrientes bajo las paredes. Prácticamente era jugarse la vida en paredes o acantilados para pescar sobre peñas o cañizos, obteniendo un ingreso para la economía familiar.
Les Pesqueres hoy
Por su peligrosidad y los distintos avances en otras técnicas de pesca, les pesqueres ha pasado, prácticamente, a ser historia. Aún así, se pueden contemplar restos de escaleras y cañizos en diferentes zonas de la Costa Blanca Norte como la ya mencionada antes Morro de Toix, en Altea. En Jávea se encuentra la cala de Les Pesqueres, a la que se accede desde el Mirador de Ambolo. En Benitachell se encuentra el lugar donde se respira la esencia de esta antigua práctica: la famosa ruta de los acantilados recorre diferentes puntos desde donde los más valientes se atrevían a realizar sus capturas.
¿Conocías esta parte de la historia de la Costa Blanca Norte? Seguro que, si no, te has quedado asombrado. Si te has quedado con ganas de saber más sobre este antiguo arte de la pesca, te recomendamos que visites la web Nits de Tinta, un homenaje en forma de proyecto audiovisual que gira en torno a la vida de estos pescadores. No te pierdas nuestros próximos artículos de blog en los que seguiremos contando historias, novedades y actividades cerca de Residential Resort Cumbre del Sol.